“El consumo de sustancias muchas veces es multicausal y no sólo es el vínculo que la persona establece con una sustancia, sino que también se da por factores sociales, familiares o laborales”.
Este hallazgo puede resultar crucial para comprender los mecanismos cerebrales que subyacen en las adicciones a drogas y permitir implementar intervenciones preventivas, así como el desarrollo de nuevos tratamientos para el trastorno por consumo de sustancias.
Si se prolonga la prohibición que ha reducido un 95% el cultivo de opio en el mayor país proveedor de heroína del mundo, podrían darse un desabastecimiento y la entrada de productos como el fentanilo, causante de masivas sobredosis mortales.